Si te preguntas qué es un concentrador de oxígeno portátil, para qué sirve y si es mejor que uno convencional, continúa leyendo. A continuación te explicaremos más sobre los concentradores de oxígeno.
¿Qué es un concentrador de oxígeno portátil?
Un concentrador de oxígeno es un dispositivo médico que brinda terapia de oxígeno a personas con problemas respiratorios crónicos. Dentro de estas complicaciones, se encuentran la fibrosis pulmonar, enfermedad pulmonar obstructiva crónica, asma severa y otras afecciones que perjudican la capacidad pulmonar.
Este dispositivo les otorga a las personas un suministro constante de oxígeno para facilitar el proceso respiratorio, disminuir la fatiga y aumentar el bienestar general. Por eso, puedes emplear este aparato con el fin de ejecutar las oxigenoterapias desde casa y ayudar en los cuidados del adulto mayor con insuficiencia respiratoria.
Cabe mencionar que los concentradores funcionan aspirando el aire de la habitación, para luego filtrar el nitrógeno para que el aire que se respire contenga un porcentaje superior al 21% de oxígeno.
Por otra parte, los concentradores de oxígeno se usan solo cuando un especialista ha ordenado proceder con oxigenoterapia. Esto es relevante, porque si un adulto mayor respira grandes concentraciones de aire sin requerirlo, puede generar problemas a su salud. Además, forma parte de los derechos de los adultos mayores contar con todos los cuidados necesarios para su bienestar.
¿Cuál es la diferencia entre un concentrador de oxígeno portátil y uno convencional?
La diferencia entre un concentrador portátil y convencional se encuentra en el tamaño y peso. Los concentradores convencionales están hechos para ser utilizados en el hogar o en salas médicas. Son más grandes, pesados y ocupan mucho espacio. Por ese motivo, son los indicados para personas que se limitan a estar en un lugar fijo y que no se mueven con regularidad.
Por otra parte, los concentradores de oxígeno portátiles están diseñados para personas que realizan actividades fuera de casa y precisan de mayor libertad. Por ejemplo, si conoces cómo afecta la soledad a personas mayores, entenderás que este dispositivo es sumamente útil para aquellas que prefieran salir de casa a compartir.
Igualmente, son más ligeros y compactos para ser transportados de un lugar a otro. Además, suelen funcionar con pilas o baterías, algo útil cuando no hay disponibilidad de electricidad.
¿Cuál tipo de concentrador de oxígeno es mejor?
Para elegir el mejor tipo de concentrador, debes evaluar las necesidades de la persona que lo requiere y la importancia de las redes de apoyo. Un concentrador convencional es una elección adecuada para aquellos que necesitan oxígeno constante todo el día.
Además, estos aparatos tienen mayor capacidad de flujo de oxígeno y poseen una conexión continua de energía al estar conectados a una toma de corriente eléctrica. Incluso, proporciona funciones extras como la filtración de aire y la humidificación.
Asimismo, tienen un diseño robusto que permite que resistan y duren por mucho tiempo, siempre y cuando se mantenga el concentrador en un lugar fijo.
Así pues, un concentrador portátil es ideal para salidas cortas, caminatas u otras actividades. También cuenta con la posibilidad de ajustar los niveles de flujo de oxígeno según las necesidades de un adulto mayor en casa.
De ese modo, puedes adaptar el nivel de oxígeno dependiendo de la actividad que realice cada persona. También es útil para la realización de un trabajo como servicio de acompañamiento, geriatra a domicilio, podólogo a domicilio, cuidados paliativos a domicilio, entre otras.
Por otra parte, el concentrador portátil es mejor para operar de forma silenciosa, lo que es indicado para sitios donde la tranquilidad es un factor clave, como en lugares públicos, en el trabajo o mientras se duerme.
Ahora que comprendes lo que es un concentrador de oxígeno portátil, te invitamos a examinar tus necesidades para elegir el que más se adapte a los requisitos que necesitas.