Acerca del cuidado de mayores, reflexiona la enfermera de Situ – Envejecer en Casa, Suleika Ledezma

“Soy venezolana y enfermera de profesión. En mi país trabajaba en diferentes clínicas y hospitales, un trabajo muy movido y activo en el que había mucha adrenalina. Llegué a Chile en marzo de 2018 y desde esa fecha me dedico al cuidado a domicilio.

El cambio de un trabajo a otro ha sido muy significativo. Al principio me hacía mucha falta tener más actividad y circulación. Me costó acostumbrarme a los tiempos de ocio que aparecen durante el día mientras las personas mayores a las que cuido descansan o duermen, pero uno se adapta a todo y eso ahora me gusta. Aprovecho ese tiempo para hablar con mis familiares o para leer, porque me he dado cuenta de que si no haces nada te agobias y eso genera más estrés. Estando ocupada o en movimiento no piensas tanto.

Es bonito este trabajo porque a quienes cuido son personas que no solamente necesitan atención, sino también afecto. Y me ha empezado a gustar darles cariño, porque aunque cuando se van es como que se te fuera un familiar, vives un luto y eso afecta mucho, hay también un lado súper positivo, y es que me quedan todos los recuerdos y me mantengo en contacto con sus familiares.

Si eres una buena cuidadora y te adaptas bien al domicilio, ellos te quieren, están pendientes de tu vida, te escriben, te recomiendan a otras familias. Eso es muy bonito, sobre todo para uno que es de otro país. Se siente bien sentir ese calorcito”.

Fotos: Constanza Miranda