Alimentación Segura

El trastorno de deglución es una condición que dificulta el acto de tragar y que se puede manifestar de varias formas: tos o atragantamiento al comer o inmediatamente después de hacerlo; cambios en la voz (se pone más húmeda); náuseas y/o arcadas al alimentarse; dificultad para controlar la saliva o formar el bolo; latencia previa a tragar; tragar la misma cucharada más de 1 vez o en pequeñas cantidades; residuos en la boca después de comer; carraspeo frecuente durante o después de las comidas.

Algunas recomendaciones para evitar riesgos:

1. Mantener una buena higiene oral y dental, cepillando después de cada comida.

2. Comer en un ambiente tranquilo y sin distracciones.

3. Sentarse en una silla con la espalda correctamente alineada y apoyada en el respaldo. Si la persona está en cama, se debe elevar el respaldo en un ángulo lo más cercano a 90º.

4. Controlar el ritmo de la alimentación haciendo pausas en caso de ser necesario.

5. Preferir cucharadas pequeñas y sorbos controlados con bombilla.

6. Respetar horarios de alimentación y evitar bocadillos entre comidas.

Es muy importante evitar: mezclas de líquidos y sólidos (cereal con leche), masticables, plátano, pan, legumbres enteras, arroz, melón, sandía, pera de agua, helados o gelatinas poco estables, pieles, grumos, huesitos, pescados con espinas, barras de cereal, frutos secos.

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Fuente: Javiera Rodríguez, fonoaudióloga de la Comunidad Situ