La terapia ocupacional tiene como objetivo que los pacientes puedan conservar su independencia para la realización de las actividades cotidianas que se relacionan con la alimentación, la higiene personal o el vestir. De esta manera, es posible conservar un mayor grado de autonomía y un mejor nivel de vida. A continuación veremos cómo la terapia ocupacional a domicilio orientada a personas mayores puede satisfacer las necesidades específicas de cada persona.
Gracias a este tipo de tratamientos, los pacientes experimentan una mayor motivación para superarse a sí mismos, se mantienen conectados con su entorno y sostienen sus relaciones con los demás. Además, esta terapia es una forma efectiva de combatir el envejecimiento patológico provocado por enfermedades como el Alzheimer o el Parkinson, y otras que son propias de la edad avanzada. Por lo mismo, se puede decir que este tratamiento es esencial cuando hablamos de cuidados del adulto mayor.
Terapia ocupacional a domicilio para sostener las actividades de la vida diaria
Para resultar efectiva, la terapia ocupacional a domicilio debe estar siempre dirigida a un objetivo concreto vinculado a la prevención de la disfunción y el mantenimiento de distintas destrezas. Lo primero que hacen los terapeutas profesionales es estimular la participación del paciente en las actividades de la vida diaria. Esto es clave, ya que las personas que han recibido asistencia durante cierto tiempo o que están en un proceso de rehabilitación pierden la costumbre de valerse por sí mismas.
Entonces, para que el paciente recupere independencia, el terapeuta ocupacional emplea su criterio profesional y considera cuáles son las características de la patología que sufre. A partir de este análisis es posible diseñar actividades para volver a ocuparse del cuidado personal. En una segunda instancia, la terapia ocupacional a domicilio busca que el paciente vuelva a encargarse del cuidado del hogar y otras tareas.
Algunas de estas actividades para adultos mayores son cocinar, limpiar la casa, comprar alimentos, controlar la medicación, manejar el dinero y salir a pasear. Recuperar la capacidad de trabajar puede ser también un objetivo.
¿Cómo recuperar capacidades funcionales motoras?
Los reflejos, el control de la postura y la coordinación motora son aspectos fundamentales para que una persona pueda volver a realizar distintos tipos de actividades cotidianas. En este sentido, también es fundamental que el cuerpo recupere un nivel de tolerancia adecuado para los movimientos que es necesario hacer. De todas formas, para evitar lesiones, existen ejercicios para el adulto mayor pensados exclusivamente en sus capacidades físicas.
El primer paso para conseguir un avance es la realización de una evaluación kinésica. De esta manera, es posible comprender en qué estado se encuentra el individuo. Esta prueba incluye un examen de postura, de la capacidad de movimiento activo y de la fuerza muscular. También es vital determinar la capacidad neurológica de la persona y sus reflejos.
De ser necesario, el profesional que realiza la visita para evaluar al paciente puede ordenar estudios adicionales como radiografías, resonancias magnéticas o tomografías. Una vez completada esta instancia, es posible orientar el tratamiento de rehabilitación para conseguir los objetivos que resulten necesarios. Una opción frecuente son las sesiones de kinesiología a domicilio.
Recuperar la independencia
Las sesiones de kinesiología a domicilio son una manera efectiva de rehabilitar a un paciente con dificultades motoras y sensoriales. Los especialistas en esta materia pueden practicar técnicas manuales que se aplican directamente en las zonas del cuerpo afectadas. Además, mediante una rutina muscular es posible conseguir la fuerza necesaria para que el paciente recupere funcionalidad.
Por otra parte, una terapia ocupacional a domicilio puede incluir ejercicios y tratamientos de rehabilitación respiratoria o neurológica. Como ejemplo tenemos a aquellos pacientes que requieren de un concentrador de oxígeno para su tratamiento. Aquí la terapia ocupacional puede ayudar al paciente a adaptarse a esta nueva forma de vida, enseñándole técnicas para administrar su oxígeno, mejorando su calidad de vida y permitiéndoles ser más independientes.
Aquí volvemos a lo que hemos mencionado al comienzo del artículo: este tipo de ayuda profesional se ajusta a las necesidades de cada persona. En todos los casos, la terapia ocupacional a domicilio busca que el paciente recupere independencia y experimente una mejora en su calidad de vida.
Cuenta con la terapia ocupacional a domicilio de Situ
La terapia ocupacional a domicilio puede ayudar a los pacientes de la tercera edad a mantener su funcionalidad y calidad de vida sin salir de su zona de confort, independiente de las condiciones médicas que puedan enfrentar. Todo con el fin de ayudarles a desarrollar estrategias de manejo del dolor o adaptación a su entorno y facilitar su capacidad para realizar actividades diarias. Por otro lado, esto contribuye a prevenir el deterioro cognitivo y la depresión en el adulto mayor.
Como puedes ver, la terapia ocupacional a domicilio puede ser un complemento importante en el servicio de geriatría. ¡Así que no dudes en contactarnos y conocer nuestros servicios geriátricos! Con paciencia y constancia, puedes mejorar la calidad de vida de la persona mayor que está en casa.
